Lo que se debe evitar en una entrevista de trabajo...

Tanto los entrevistadores como los entrevistados estĆ”n propensos a cometer errores en la entrevista laboral. Algunos provienen de una falta de preparación, otros de una inadecuada ejecución, pero finalmente todos tienden a generar una impresión equĆvoca, tanto del que aspira a un puesto como de quien presenta el cargo y sus condiciones.
Para un entrevistador, por ejemplo, es vital estructurar la entrevista, predefinir quĆ© competencias quiere saber si su entrevistado posee o no. Dado que las competencias son comportamientos observables, el entrevistador no deberĆa preguntar sobre situaciones hipotĆ©ticas futuras (“¿QuĆ© harĆas si…”), sino en hacer que su entrevistado le relate eventos del pasado (“CuĆ©ntame de alguna vez en la que tĆŗ…”).
“Al preguntar sobre el contexto de un incidente pasado, sobre los participantes, las acciones y los resultados del incidente, el entrevistador podrĆ” deducir la participación del entrevistado y si mostró, en aquella ocasión, los comportamientos que estĆ” buscando. Un incidente pasado es mĆ”s difĆcil de inventar, y revela mĆ”s que el describir una situación futura”, explicó JosĆ© Antonio Espinoza, profesor e investigador de Centrum Católica de PerĆŗ.
En el caso del entrevistado, uno de los errores mĆ”s comunes es que tiende a ponerse nervioso, a hablar mĆ”s de la cuenta o a mostrar inseguridad. Si bien estos comportamientos podrĆan considerarse mĆ”s bien normales o lógicos, lo cierto es que la exageración de cada uno de ellos tambiĆ©n puede jugar en contra del postulante.
“El entrevistado debe tener una preparación adecuada. La mĆ”s importante estĆ” en clarificar sus valores, sus expectativas, sus metas, su plan de vida. Esto darĆ” el marco para poder responder a las preguntas mĆ”s imprevistas, mostrando consistencia en sus respuestas sin caer en contradicciones”, explicó Espinoza.
Adicionalmente el entrevistado debe estar preparado para hablar de sus habilidades emocionales. SerÔ importante que describa como es que reconoce e influencia tanto en sus emociones como en las emociones de los demÔs. El entrevistado debe expresar seguridad, confianza en sà mismo y entusiasmo.
“Es importante que el candidato procure transmitir esos aspectos que necesita conocer el entrevistador y, por supuesto, que en la primera impresión se refleje la personalidad mediante un apretón de manos, una apariencia adecuada, la extroversión justa y una comunicación verbal, clara y precisa”, comentó AndrĆ©s O. Hatum, profesor de comportamiento humano en la organización del IAE Business School de Argentina.
Percepciones equivocadas. Uno de los tĆpicos errores que comete el entrevistador es el que, sin duda, constituyen las percepciones equivocadas. SegĆŗn el especialista de Centrum, una de ellas es el “efecto halo” que consiste en fijarse solamente en un detalle y calificar con ello al entrevistado en su totalidad, como por ejemplo, su universidad de origen, la empresa en la que antes trabajó y la persona que lo presenta, entre otros.
“El entrevistador debe concentrarse en determinar por sobre la impresión que pueda causarle el candidato aquellos aspectos relevantes como son la iniciativa, la habilidad para trabajar en equipo y lograr los objetivos, la competencia tĆ©cnica, el intelecto y las dotes de liderazgo, entre otros”, coincidió Hatum.
En ese sentido, el acadĆ©mico del IAE recalcó que uno de los problemas que mĆ”s interfieren en un proceso de selección es precisamente que los entrevistadores pasan por alto información importante, hablan demasiado, se dejan afectar por prejuicios y estereotipos y, muchas veces, estĆ”n presionados por cubrir el puesto que necesitan.“El entrevistador, en un proceso de selección laboral, debe dejar que la personalidad del candidato se imponga por sobre aquello que es necesario: detectar la habilidad que tiene el candidato para hacer el trabajo”, estimó.
Finalmente, los especialistas afirmaron que, ante las preguntas del entrevistador, es de esperarse que un buen entrevistado piense algunos segundos antes de responder. Sus respuestas no tienen que ser inmediatas, pero cuando responda debe hacerlo con convicción. “Y en algunos momentos con pasión, porque la pasión convence, concluyó Espinoza.
Errores insólitos. A fines de 2008, el sitio www.careerbuilder.com, una de las cuatro pÔginas estadounidenses mÔs importantes en la búsqueda de empleo, reveló los peores errores que han cometido los aspirantes a un puesto de trabajo.
A través de una encuesta realizada a 3.061 personas encargadas de contratar personal para las empresas y a profesionales de recursos humanos, la web elaboró una lista con las equivocaciones mÔs insólitas vistas en cualquier entrevista laboral.
Entre Ć©stas se encontraba la de un candidato que comentó a su entrevistador que no se quedarĆa por mucho tiempo en el puesto al que postulaba porque un tĆo suyo, que estaba a punto de morir, le dejarĆa una gran herencia.
Un segundo postulante salió repentinamente del lugar en el que se le estaba entrevistando, porque su telĆ©fono móvil estaba sonando y porque debĆa tener una conversación privada.
No menos insólita resultó la de un candidato que admitió haber sido despedido de su último trabajo por haber golpeado a su jefe, y la de otro postulante que se presentaba a un puesto de contabilidad y que aseguró ser un profesional óptimo en relaciones sociales, pero muy malo en números.
Finalmente, el sitio incluyó en su lista a un último candidato que sacó un cepillo y comenzó a peinarse durante la entrevista. Saque usted sus propias conclusiones.
Tomado de www.americaeconomia.com .
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